Hace falta Usted.

Hace falta usted, disculpe que se lo diga cuando las cosas se ponen asi...
hoy el dia no se de que color está.
Hace falta usted.
Mañana que el dia cambie de color, hará usted falta también.

suma de noches de vómito.

No comprendo. Es una transformacion sin proceso, no hay metamorfosis simplemente cambia de forma, sus ojos verdes se tornan rojos, pequeños y desviados, incluso agresivos, amenazantes todo su cuerpo lo es cuando se transforma; ya no camina, se tmabalea como si fueran las paredes las que lo obligaran a mantenerse de pie y lo impulsaran otro poquito hacia adelante , paso a paso...¿cómo puede ser tal contradicción? ¿a caso es la luna, la brisa de la noche, la caida del sol? ¿cómo es que de dia se entrega todo al amor, desgarrandose por los que ama, y en la noche desgarra a los que ama y se entrega todo a aquella posión que no es precisamente de amor?

Pero amanece y la luz de un nuevo sol permite ver los escombros de los muros que rompió. Heridas, silencio, dolor. La resaca ahora es su mayor verguenza.

Intenté comprender, en verdad intenté, pero no lo logré y terminé igual que todos excusándolo, pero una noche las paredes ya no lo impulsaron mas, el suelo se vengó de tantas evasivas y finalmente logró su cometido, su cuerpo tambaleante cayó. Ya no te excuso, aunque aún te temo cuando decides, o no convertirte en esa masa que no piensa pero reacciona, y mal ,muy mal, fuerte y agresivo. Me da miedo verte asi, de tes to verte asi, y me da pesar las cosas ridiculas que dices. Y es que asi , ya lo dije, no piensas.
Si es tu refugio, si es tu escapada, si es tu descanso, dejame decirte te has equivocado...y eres sordo, y terco y estas envejeciendo y no entiendes que no eres super man mucho menos cuando tomas, y ya no sé como más decirtr que tengo miedo, que abras los ojos, que lo controles...

Amanece y la luz del sol permite ver los escombros de los muros que agrietaste; ella no amaneció a tu lado, el silencio te grita que algo ha pasado, y las heridas sangran lágrimas...
La resaca es tu peor verguenza.

me rompes el corazón !

a merced.

Ebriedad que me hace perder el equilibrio, ese vicio de depender de un olor, que cuando no esta presente me lo invento.
bendito vicio que embriaga el vivir a merced.

Ya no confío...

No es difícil reconocerlo al verlo,

Lo he visto en televisión, en revistas, periódicos, en Internet, lo he visto en la carretera cuando salgo a pasear.

Escucho de usted en la radio, y cuando hablan de usted me lo puedo imaginar, con sus botas negras, su uniforme de manchas, su gorra, a veces con un casco y siempre con un arma.

Hoy lo vi en una vaya cuando iba camino a mi casa.

Llevaba el mismo uniforme, y su cara pintada, a su lado había un letrero que decía Los Heroes en Colombia si existen.

Lo he vuelto a ver y escuchar una y otra vez. Usted ha hecho cosas muy malas, ha hecho doler, ha torturado, ha hecho llorar, ha matado, ha violado, ha hecho que mi frente se arrugue, que mis ojos se mojen que mi cuerpo se estremezca.

Ayer descubrí que usted llevaba un nombre en su uniforme. Ya no me interesa ver los nombres en los demás uniformes; Y es que el problema no es su nombre, es su uniforme, Ud era su uniforme, al menos para mi y para todos los demás.

Usted abusó del poder que le daba su uniforme. Ya ese uniforme no es poder, no es seguridad, es miedo y desconfianza, es verguenza, da dolor.

Lo sigo viendo en esa vaya cada vez que voy a mi casa, ya no creo que Colombia tenga verdaderos héroes, no lo es usted, ni su gorra ni su uniforme.

Ya no confío en su uniforme!

http://www.semana.com/Topico.aspx?valorTop=CRIMEN%20DE%20NI%C3%91OS%20EN%20ARAUCA

Con afán estiraba la mano buscando soportar y aferrar su pesado y anciano cuerpo a alguna parte de aquella bestia, intentando no ser una masa que simplemente se mueve al compás de aquel animal que se mueve, acelera y desacelera sin compasión de quien lo monta. Es inútil ya buscar el lugar que por derecho le pertenece, pues otros ya lo han ocupado, se han casi apropiado de éste, ignorando por completo que él esta allí, y eso que el blanco de sus canas llama la atención de todos, él pidiendo a gritos y gestos silenciosos para que le sea entregado su puesto;

Calla, si, porque como cuesta aceptar cuando se necesita una ayuda, un reposo, como cuesta incluso reclamar los derechos que las arrugas, la experiencia, la edad han ido exigiendo. Pero por mas que las canas que adornan su cabello hagan advertencia de que es un cuerpo torpe y débil se encuentra allí, es vergonzoso, aceptarlo, es doloroso también, saber que ya no eres capaz de soportar de pie un recorrido en bus en una ciudad como Bogotá.

Le temo a la edad, a la vejez. No tal vez como la mayoría lo hace, pues no son las canas y las arrugas lo que me atemoriza. Físicamente me angustia la idea de perder el control de mi cuerpo, la independencia, y peor aun, los sentidos.

Me duele la vejez de hoy y estoy lejos aun de ella.

Me duele como el mundo sigue girando y no espera, no mira atrás para ver quien se va quedando. Y esto es aun mas cruel que Darwin, esto no lo considero la ley natural. Es atroz la forma en la que cada sistema se complejiza minuto a minuto olvidando a los que les da miedo salir de su casa, porque afuera estará el lobo de la velocidad. Les da miedo que el lobo se los coma.

Y es que una maquina no repite el mensaje, y es que entre todos los botones no hay uno para subir el volumen o ampliar la letra. Esas opciones ya no las hay.